TRATAMIENTO DE FRACTURA DE FEMUR BILATERAL POR ARMA DE FUEGO. REPORTE DE CASO.
Resumen
Las fracturas producidas por armas de fuego suelen ser susceptibles a cirugía de control de daño, evitando el deterioro generado por el “second hit” de una cirugía ortopédica de importancia y retrasar el tratamiento definitivo de las lesiones hasta que las condiciones clínicas mejoren. El concepto de esterilidad con el que entraba el proyectil hoy queda descartado al comprobarse que el calor que desarrolla una vez disparado es insuficiente para lograr esterilizarlo. Se presenta la evolución de un paciente con fractura bilateral de fémur por arma de fuego (GIIIA). El tratamiento primario del paciente agredido por arma de fuego se basa en el apoyo vital básico, priorizando las lesiones que dañen órgano blanco y pongan en peligro la vida. El tiempo de la síntesis definitiva debe basarse en las condiciones clínicas y metabólicas individuales y el estado hemodinámico, para evitar así la posibilidad de falla multiorgánica o de foco séptico.