CLAVOS ENDOMEDULARES MACIZOS COMO ESTABILIZACION PRIMARIA EN FRACTURAS DE FEMUR Y DE TIBIA
Resumen
INTRODUCCION: La reparación de una fractura es un proceso en el que intervienen factores a) biológicos (celulares y tisulares) desde la proliferación y diferenciación celular hasta la regeneración vascular; b) bioquímicos, una cascada de sustancias que se activan o modifican durante el proceso y c) mecánicos, ya que una fractura no puede curar si las condiciones mecánicas no son las adecuadas. La función del cirujano en la reparación de una fractura se debe limitar a evitar las deformaciones y prevenir las consolidaciones viciosas con la aplicación correcta de los métodos de osteosíntesis que requiere el conocimiento de su mecánica, respetar las necesidades biológicas y bioquímicas del proceso de consolidación y conocer la compatibilidad entre los tejidos receptores y los materiales implantados. En las fracturas abiertas se plantea la duda de si el EE es mejor o no que la fijación externa, y qué tipo de EE sería el más adecuado. En los politraumatizados se discute cuál es el momento más adecuado para realizar la estabilización de las fracturas diafisarias del fémur, y qué tipo de osteosíntesis es la más pertinente.
MATERIALES Y MÉTODOS: Se realizó un estudio retrospectivo observacional donde se analizaron 32 casos de pacientes en los que se utilizó un sistema de enclavado endomedular con clavos macizos. El promedio de tiempo transcurrido entre la estabilización primaria con enclavado endomedular macizo y enclavado endomedular definitivo nos arrojó un promedio de 35.2 días, siendo el periodo más corto de 4 días, y el más largo de 168 días.
A 3 pacientes se les realizo la osteosíntesis definitiva en la misma internación, en cuanto que a los 19 pacientes restantes se los otorgo el alta hospitalaria transitoria, con seguimiento por consultorio externo, hasta programar la cirugía para osteosíntesis definitiva, una vez obtenidos los materiales por parte de ministerio de salud y/o hasta lograr una mejoría de partes blandas.
El 100% de los casos se resolvieron con enclavado endomedular según técnica.
En 1 solo caso fue necesaria la apertura de foco fracturario para realizar reducción de la fractura a la hora de la osteosíntesis definitiva.
DISCUSION: Podemos coincidir con el trabajo de Keating, y O'Brien, donde hoy en día el enclavado endomedular es un método seguro y aceptado para el tratamiento de las estabilización en fracturas diafisarias de tibia tanto cerradas como expuestas.
CONCLUSION: Llegamos a la conclusión de que la estabilización de fracturas expuestas diafisarias de tibia y de fémur con enclavado endomedular macizo es una excelente opción en pacientes en los que una osteosíntesis definitiva se verá demorada por la obtención de materiales, como sucede con la mayoría de nuestros pacientes. No solo se disminuye drásticamente la tasa de embolia grasa, sino que a su vez logramos una rápida evolución de partes blandas favorablemente, y logramos disminuir las complicaciones y el tiempo intraoperatorio al evitar consolidación viciosa de la fractura y la necesidad de apertura de foco fracturario para reducción de la fractura. Todo esto ayuda a disminuir posibles complicaciones, disminuyendo la tasa de infección postquirúrgica y agilizando el tiempo de recuperación del paciente.